Cuando se cree que de veras fue elegido, el patrón es un genio

Por si nadie conoce alguno, voy a tratar de describirlo. Cuando los altos mando laborales le entregaran el puesto que ahora luce, el tipo de este comentario era agradable y amigable en extremo, de vez en cuando se tomaba sus copas con sus compañeros era lo que decimos los mexicanos “un cuate” y “jalaba” con los amigos siempre, y nunca hacia de menos a nadie; pero he aquí que los dados de la fortuna de la oficina lo erigen patrón de la misma. (puede ser una oficina de Gobierno o de Iniciativa privada)

Al principio, el señor sigue siendo igual con sus amigos, pero los que ya lo conocen bien, notan un ligero aire en el tono de voz, y una miranda que antes no se le conocía. Salen amigos del subsuelo, compañeros de todos lados. De pronto su voz suena mejor timbrada que antes. Así, sin que medie anda anterior, su inteligencia aumentara hacia el infinito (aumentara mas, si la oficina es mas grande, mas importante digamos).

Aquel individuo, bueno para la carambola, el pool, bolita y dominada, ahora habla de reformas, de proyectos, de ideas que harán que el país salga adelante del atraso en que lo dejaron los de antes. Los de ahora
(Incluyendo al patrón de nuestra historia) son los buenos, los de antes son los malos.

Nuestro héroe cambia hasta en su casa, a la mujer le ordena como si fuera uno de sus subalternos. A sus ayudantes los amaestra para que le digan de alguna forma y casi se cuadren cuando el salga. Los enseña a adivinarle las ordenes de por medio de señas. Usa trajes de gran costo. Habla con seguridad y sus decisiones son las buenas.

Yo mando y si me equivoco, vuelvo a mandar. Va de subida la marea lo que antes decía ya no es valido en este momento. Comienza a arrepentirse de algunos amigos y es que ahora se roza con “The Top Class”. Ensaya poses cuando se sabe solo. Se mira al espejo y adopta posturas. Revisa en los periódicos lo que se diga de el a favor es lo bueno cuando hay alguna critica negativa, de seguro la escribió algún imbecil. Acepta las innumerables invitaciones, no para convivir, sino para lucirse frente a los de abajo. Si alguna promesa hizo, antes de ser lo que es ahora se le olvida, no sirve; para que meterse a resolver problemas de los demás, el ya tiene los mas altos. Los que la patria (o la empresa) le encomendó a su firmeza y carácter.

¿Y si otro de mas altura que el le habla?, entonces el jerarca se mueve rápido, corre, suda, se acongoja, agacha la cabeza y sonríe con humildad. Algún día estará en posición del que ahora lo hace temblar con su sola presencia. Mientras su coro (reducido o monumental de acuerdo al puesto) grita las mayores alabanzas. Descubre adjetivos, aplaude a su paso. Y todo eso que hace el patrón de esta breve historia sienta que es el “ el mero mero”, el mas inteligente y el mejor de todos.

Notas
1- Cuate --> Amigo.
2- Jabalaba--> Iba, Parrandeaba.
3- El mero mero --> El mejor.